Para hablar de las conductas de valor de los grupos de interés asociados a la reputación, voy a seguir los contenidos de un libro imprescindible, «Reputación corporativa», de Carreras, Alloza y Carreras. Se puede decir que la reputación corporativa se asocia al valor porque promueve conductas de apoyo en todos los colectivos interesados en la empresa (grupos de interés).

Dicho de otra forma, si la reputación corporativa es importante es porque influye en la forma en que se comportan los distintos grupos de interés hacia la organización. 

Para Charles Fombrun, autor del archiconocido libro: Reputation: Realizing Value from the Corporate Image, se debe hablar de varias reputaciones, tantas como grupos de interés haya. Aquí os dejo un vídeo suyo. 

Siguiendo con los autores inspiradores de este post, las imágenes de los colectivos son el instrumento más apropiado para despertar conductas de valor para una organización. 

De todos los colectivos que se relacionan con una marca (los autores usan el elegante término «firma»), los más importantes son los que mantienes un vínculo directo de interés. Son estos cuatro: 

• Inversores.
• Clientes.
• Proveedores.
• Empleados.

Concretemos estas conductas de valor de los grupos de interés asociados a la reputación: 

• Inversores:
  • Posibilidad de compra.
  • Tiempo de permanencia.
  • Rendimiento de acciones.
• Clientes: 
  • Mejora la acción comercial. 
  • Reduce la incertidumbre.
  • Lealtad del cliente.
  • Retención del cliente.
  • Insensibilidad al precio.
  • Barreras psicológicas.
• Proveedores:
  • Mejora la acción comercial. 
  • Reduce la incertidumbre.
  • Aumenta la lealtad.
• Empleados:
  • Atracción del potencial.
  • Valor del trabajo.
  • Mayor esfuerzo.
  • Menor coste laboral.

LIBRO RECOMENDADO